domingo, 3 de octubre de 2010

DESILUCIONES



OFRENDA
En árida hondonada
Color violeta negro,
Lejana del agua del deseo
Fuera del crisol de oro
De anhelos sempiternos,
Y en total desolación,
Se encuentra aún de pie
Él árbol humilde del amor.
Triste  es  su  mirada
Al ver caídas de sus ramas,
Flores de fe esperanza y sueños
Muertas  a su entorno,
Bañadas en lluvia seca que resbala de sus ojos.
Con vos casi perceptible blasona de su alma,
Sonata de agridulce poesía,
En tonos de obstinación
Con notas de valentía,
Manantial nítido de versos,
Carentes de egolatría.
Asido ponderantemente a no morir
Ignora la flecha envenenada de traición,
Que atraviesa su escuerzo corazón.
Seguro de la madera
Labrada de sinceridad
Y barnizada  de lealtad,
Con que fue acorazado su tronco.
Herido y en agonía,
Mira bondadoso
 Al arquero de la mentira,
Que cruel e indolente
Su flecha lanzó,
Para extenderle sus ramas
Cubiertas de amor sempiterno,
Y al final de los versos
Firme exclamó,
No moriré,  he de vivir
Cuando necesites de mí,
Lleno de amor estaré para ti.
NOEMI
02-10-2010
9:00  P.M.


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