¡VEN!
Ven, vérsale
a mi esencia tu estadía,
tu
paz sin sufrimiento ni agonía,
solo
entonces,
ya no
dolerás como ahora dueles,
ni la
tristeza impedirá
hacer
magnánima
la
hora de tu muerte,
¡Oh,
mi muerte asida de tu muerte!
por
eso, ahora llora el sol cuando me mira
y la
añoranza lee poemas
sentada
en la cima del ocaso,
¿Qué haré
con el sabor de leche fresca,
que
guarda aùn la comisura de mis labios?
mi
espíritu se ahogó,
en
cada gota de la sangre,
que
tu cuerpo derramó
¡Ven,
ven!
abraza
con tus alas a mi alma
que
bañe tu mirada el corazón
que
deje de gemir en cada palpitar,
que
ya no duela tanto tener que respirar,
¡Oh,
ven por favor, vérsame!
vérsame
de allí, en donde ahora estás,
¡Ven,
vérsame más!
05-08-2012
04:23 P.m.
UN POEMA DE GRAN TRISTEZA POR LA ENORME PERDIDA SUFRIDA!! ES UNA GRAN ANGUSTIA QUE SE TRASLUCE EN VERSOS MUY SENTIDOS Y CON EL DESEO EXPLICITO DE SEGUIR AL ESPIRITU ALEJADO!!
ResponderEliminarQUE EL TE DE LA PAZ Y LA ACEPTACION DE LO SUCEDIDO!!
ES UN POEMA MUY TRISTE DONDE SE EVIDENCIA LA MAGNITUD DE LA PERDIDA. ES ADEMAS UN TRIBUTO MUY SENTIDO Y LLENO DE AMOR A LA AUSENTE.
ResponderEliminarQUE EL TE DE LA PAZ Y LA ACEPTACION !!
Poeta, en las grandes perdidas, a veces llegan grandes ganancias, como ahora, es un poema aromatizado de dolor y esperanza, indicador del camino a la tranquilidad y aceptaciòn, tienes que llegar y ganar,
ResponderEliminarasì ganaremos todos. Te amamos divina. RODRIGO